Saboreo la sidra en grandes tragos.
Pequeñas cantidades en grandes vasos.
El tintineo del líquido al chocar contra el vidrio,
acompaña los fuegos artificiales
de gotas alocadas que salen hacia fuera,
en un intento feroz, por buscar otros caminos.
El amable paisaje,
me brinda sus casas de lindas fachadas,
bosques de hayas, fresnos, robles, avellanos, acebos
y multitud de hierbas anónimas
que aromatizan mi caminar.
Es el perfume de la tierra,
que me homenajea en estos días
donde me abro a nuevos parajes .
Autora: Anaisay
EL olor a tierra, del rocío en las hojas, el viento… son regalos que no todos saben apreciar. Tú lo haces, y con letras hermosísimas.
🙂
Saludos!
By: kiram on julio 29, 2008
at 9:15 am